Sichel aboga por paz en La Araucanía y afirma que "no hay soluciones mágicas para la violencia"

En su primera visita a la Araucanía como ministro de Desarrollo Social y Familia, Sebastián Sichel, realizó diversas actividades con comunidades y representantes indígenas junto con participar en el encuentro ENELA donde instó a todos los sectores y actores a lograr la paz en la zona.

Al término de dicho encuentro con los sectores productivos de la Novena Región recibió como regalo manos de agricultores afectados por violencia rural espigas de trigo quemadas y cartuchos de escopetas percutados. Al respecto indicó que "como gobierno entendemos el dolor que sufren las víctimas y hemos sido explícitos que la violencia, es violencia; y el terrorismo, terrorismo; y tenemos como gobierno un compromiso de tratar de detener estos actos de violencia".

Junto a los testimonios de violencia le entregaron a Sichel una carta "es un símbolo de lo que ellos sienten con los actos de violencia, pero para nosotros significa aumentar el Estado de Derecho y las condiciones de seguridad que tenemos que tener para el desarrollo de la actividad productiva de la región", manifestó.

Agregó que "aquí no hay soluciones mágicas para detener la violencia, o que tenemos que hacer es seguir innovando y encontrando soluciones para terminar con la violencia rural".

Destacó el debate generado en ENELA a sostener que "me gusta ver que hay puntos de encuentros, se necesita aquí una solución legal, una estrategia de desarrollo, trabajar con la pobreza sumergida, tenemos que ponernos de acuerdo entre todos".

También dijo que su interés está en generar consenso respecto a avanzar junto al parlamento y los representantes de la zona en el proyecto de reconocimiento constitucional a los pueblos indígenas.